Soy un cuarentón

Es algo que sabes pero de lo que no siempre eres consciente. Hay veces que sí, hay veces que no. Hoy, quizás porque es el primer día del último mes del año, soy consciente de ello. Y soy consciente de que la vida tiene etapas. Imagino que las etapas van también por categorías, puedes estar en una buena etapa personal y a la vez en una mala etapa de salud. O una buena etapa profesional pero una mala etapa familiar.

Uno de los vectores a analizar pueden ser los amigos. Amigos de la infancia, amigos del instituto, amigos de la universidad, amigos del primer trabajo, amigos del deporte. No sé a quién le decía yo, o quizás simplemente lo soñaba, que llevaba jugando quince o veinte años con el mismo grupo. Y esta persona me contestaba (cada vez estoy más seguro de que lo soñé) que él recordaba cuando esa cifra era relevante. La persona, frisando los 70, daba a entender que ahora, cuando pensaba en algo parecido, eran 30 ó 40 años los que habían pasado.

Hoy me he dado cuenta de que ya hace 20 años que aprobé la última asignatura de la carrera. A decir verdad, unos días faltan, pero se capta la idea. Hace también 20 años de la última vez que vi a algunos compañeros de clase de la universidad. A decir verdad, unos meses faltan pues los vi después en la graduación, pero se capta la idea.

Entonces éramos veiteañeros empezando a vivir por nuestra cuenta, hoy la fecha de la jubilación no está mucho más lejos que la fecha del comienzo de la universidad. Definitivamente soy un cuarentón, me duelen las rodillas del partido de hoy y es posible que mañana me sigan doliendo. Pero no importa, a mis cuarenta y tantos he empezado a recibir clases de pádel. Sigo teniendo ganas de aprender cosas. Cada mañana intento aprender un poquito de alemán, en el trabajo me divierto cuando no tengo que hacer siempre lo mismo ... se capta la idea.

Un saludo, Domingo.

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