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Mostrando entradas de enero, 2018

¿Es tan difícil?

Tuve un tiempo en el que hababla mucho de la amistad. No se me pasó del todo. La amistad sigue siendo un elemento recurrente en las entradas del blog. Quizás y solo quizás, ahora ha dado paso a la profesionalidad o su reverso la incompetencia. ¿Es tan difícil hacer tu trabajo sin que te lo tengan que recordar dos veces por semana?. Llamé la semana pasada. Me dijeron que Correos había devuelto la carta el día 10 de enero. Debía estar a punto de llegar. Llamé de nuevo días después. Igual respuesta. Recordé las consecuencias. Lo único que recibí fue una versión ligeramente diferente de la respuesta inicial. Esta vez debía volver a llamar y, en caso de no haber recibido la carta, recordar de nuevo el tema de las consecuencias. Llamé y dos semanas después de que Correos iniciara el proceso de devolución de la carta, todavía no se sabía nada. En ese momento se procedió a dar una solución temporal hasta que pudieran conseguir poner las manos sobre la dichosa cartita enviada por ellos a una

Normalidad

La semana pasada fue la primera semana del año sin festivos. Se puede decir que fue la semana de la vuelta a la normalidad. Así pues, esta quizás pudiera considerarse como la primera semana simplemente normal, sin festivos en la anterior, sin festivos en la siguiente. Al menos con festivos de carácter nacional. El caso es que para ser una semana normal han pasado algunas cosas. Otras, en cambio, simplemente no han pasado. No ha pasado por ejemplo que hayan liberado el dominio antiguo. No ha pasado que quien muchas veces haya incumplido sus promesas, las haya cumplido ahora. No ha pasado que haya sido una semana anodina sin que nada pase. Siempre pasa algo. Ha pasado que hay quien ha recibido un "Strike three" y ha sido eliminado. Ha pasado que parece haber muchas personas inteligentes con poca inteligencia emocional. Ha pasado que hay muchas personas listas, que son poco inteligentes. No sé cómo alguien puede arriesgar un buen puesto de trabajo en el que se ha deposita

Pocas visitas

Mi blog recibe muy pocas visitas. Y está bien que así sea. No deja de ser un diario secreto escrito con la conciencia de que cualquiera puede leerlo. Sin embargo, hoy al mirar el contador de visitas de la semana pasada, he visto que no había ninguna. No le he dado mayor importancia. Muchas de las pocas visitas yo pensaba que serían internas de blogger. No sé si lo hacen pero antes (y si no lo había yo al menos así lo recuerdo) había un listado de blogs que se habían actualizado recientemente. Si alguno te llamaba la atención, podías entrar a leerlo. El caso es que todos los años archivo el contenido y creo un blog nuevo. Durante mucho tiempo, además de archivarlo, añadía los enlaces de los antiguos. Sin embargo, con el paso de los años, añadir ese listado de antiguos representaba casi más tiempo que el que necesitaba para escribir una entrada. Así pues, llegó un momento en el que decidí poner el enlace al anterior/anteriores y ya está. No recordaba cómo lo había hecho así que entré

Una semana o siete días

Eso es lo que dicen que dura la gripe, dependiendo de si tomas algo o no. Hacía mucho tiempo que no la padecía. Al menos no una tan "clásica". Clásica en el sentido de que solamente cursó con fiebre y malestar muscular. Nada del otro jueves, posiblemente he tenido suerte. De hecho parece ser que no soy el único sino más bien al revés. De ser así, esta sería la típica cepa que es más contagiosa pero a expensas de ser más benigna. Eso sí, el mecanismo que tiene el cuerpo para bajar la fiebre es un tanto tosco. La verdad es que no ha evolucionado mucho en los últimos miles o millones de años. Empapar tres o cuatro pijamas den una noche mientras el cuerpo pasa de los 39 a los 35 grados previo paso por los 38, 37 y 36 es el peaje que nos lo recuerda. Bien pensado, por tosco que pueda ser y por poco que piense en el número de lavadoras de pijamas que vayas a poner, menos hay que reprocharle. El sistema es el más simple y efectivo con los recursos que tiene a mano en ese momento.

Feliz Año

Este 2018 del cual ya hemos extraviado unos pocos días ... Sabe a magos, camellos y reno, Sabe al mejor de los aliños, Sabe a regalo de niño, Sabe a vino del bueno. Huele a coche de restreno, Huele a sierra, blanco armiño, Huele a gripe, guiño, guiño, Huele a Año seminuevo. Sabe al sabor de antes, Impregnado en agua de rosas, A estar en la cama en bata, A un roscón con frutas y nata, A eso saben todas las cosas, Besos furtivos de siete amantes. ¡¡¡Feliz Año!!!